
Ah, la vida de un narcotraficante. Es un poco como un juego de Monopoly, pero en lugar de comprar propiedades, te atrapan y te llevan a una celda. Osiel Cárdenas Guillén, exlíder del Cártel del Golfo, acaba de experimentar un descenso dramático en su trayectoria vital: de los lujos y excesos a la fría y dura realidad del Penal del Altiplano. ¿Y qué lo trajo de vuelta a México? ¡Oh, solo unos pequeños detalles como el lavado de dinero y la delincuencia organizada! Nada que un buen abogado no pueda manejar, ¿verdad?
Para los que no están al tanto, este caballero fue deportado de Estados Unidos, donde pasaba sus días a la sombra de la libertad, enfrentando cargos que, por cierto, no son precisamente un paseo por el parque. Se dice que transportó más de 2,000 kilos de cocaína en un solo año. Imagínense el volumen: es como llenar un salón de clases de niños de primer grado, pero en lugar de risas y juegos, solo hay narcos y maletines. Su regreso a México se da en un momento en que las autoridades parecen más activas que nunca, como si hubieran encontrado un nuevo hobby: atrapar a los que alguna vez fueron grandes.
Pero la pregunta del millón sigue siendo: ¿realmente aprenderá de sus errores, o simplemente se quedará esperando que se le pase el tiempo en una celda con un televisor de 14 pulgadas? Con el sistema judicial mexicano, uno nunca sabe. Cárdenas, quien alguna vez fue considerado el rey de su imperio, ahora se enfrenta a un futuro incierto donde los lujos son sustituidos por la sopa de cada día. Al final, la vida en la cárcel no se parece en nada a lo que se ve en las películas, y probablemente extrañará esos días de champagne y fiestas desenfrenadas.
Así que, mientras Cárdenas se acomoda en su nueva “residencia”, reflexionemos sobre el ciclo sin fin de la delincuencia. ¿Cuántas veces más veremos a estos personajes caer en la trampa de su propia avaricia? ¿Realmente cambiarán, o simplemente se reinventarán en otra forma de crimen? ¡Los invito a dejar sus comentarios y teorías locas! Quién sabe, tal vez uno de ustedes pueda ser el próximo guionista de una serie de Netflix sobre este tema.
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